Llevo ya unos meses pasando una etapa de transición en mi vida. Lo que más comúnmente conocemos como cambio radical del carácter y del pensamiento. He descubierto que los grandes filósofos de la vida no son aquellos que escribieron tantos libros y nos tuvimos que estudiar en el colegio, sino los más cercanos, los que han pasado por más baches en su vida, los que tienen más experiencia... esos son los que nos pueden enseñar grandes secretos de la vida y misterios sobre el comportamiento humano.
Por todo ésto mi nueva filósofa de cabecera es la Pantoja. Sí queridos lectores, ella con su gran eslogan-consejo "Dientes, dientes, que es lo que les jode" ha pasado a estar en el podio de mis pensadores favoritos.
¿Nunca os habéis preguntado por qué cuando sonreís provocáis un efecto de igual magnitud pero de sentido contrario en los demás congeneres? Es decir, se ponen de mala leche. ¡Ay! que lista la Panto... y a mi me ha costado 28 años descubrirlo...
Así que, en parte gracias a ella, soy hiperfeliz. La Panto y la asertividad han mejorado mi vida cualitativamente. Pero dejemos para otra entrada el explicaros vuestros derechos asertivos, queridos amigos, que por hoy ya os he dado una clase magistral sobre como mejorar vuestras relaciones sociales.
Por cierto, los Carnavales de Cádiz muy bien, como siempre. Mucha guasa, mucho cachondeo, mucho disfraz original y mucho conocer gente. A lo mejor repito este Sábado otra vez.
